El pasado 23 de abril convocamos una concentración en solidaridad con las últimas compañeras encarceladas
y con todas las presas en lucha.
Nos concentramos alrededor de una quincena de personas en la cual se leyó el comunicado que reproducimos más abajo.
Tras finalizar la convocatoria se proyectó el documental »Ciutat Morta», donde se habla de los sucesos del 4F, del entramado de corrupción política y torturas, del que se nutre uno de los montajes policiales más graves de los últimos años en Barcelona.
Comunicado del Ateneo en solidaridad con las anarquistas presas
El pasado 29 de marzo, otra vez el Estado se ceba con detenciones a personas anarquistas, días después de haber aprobado la llamada Ley Mordaza, y mediante esta operación policial llamada Piñata, a tres escasos meses de la operación Pandora, se llevo a cabo una surrealista y mediática acción policial con registros y detenciones en Centros Sociales y casas particulares con un balance de 38 personas detenidas en varias ciudades del Estado, de las cuales cinco de ellas siguen todavía en prisión sin más indicio que el simple hecho de ser anarquistas y difundir su ideal.
Teniendo en cuenta las “pruebas” en las que se basan, tales acusaciones resultan desproporcionadas hasta llegar a lo ridículo y tremendamente injustas, lo que pone en evidencia una vez más la poca validez del sistema político actual, la imperiosa voluntad represora de la clase dominante, el ADN profundamente fascista del Estado Español y la latente carencia de independencia política de nuestro sistema judicial.
Entendemos que la detención y permanencia en prisión responde a una voluntad claramente represora y de persecución ideológica a aquellas y aquellos que rechazan el régimen político actual, algo absolutamente inadmisible e injustificable.
Sabemos que el anarquismo siempre ha sido, en toda época y lugar, difamado y sanguinariamente perseguido por quienes detentan el poder o aspiran a él. Las cloacas del Estado, junto a los voceros del régimen (medios de comunicación), fabrican montajes para perseguir y criminalizar a quienes intentan cambiar y dar alternativas a un sistema político, social y económico inhumano.
No son las anarquistas las que desahucian o roban. No son las anarquistas las que te explotan continuamente en un trabajo denigrante para ganar una miseria. Tampoco son las que te tiran a la calle cuando ya no te pueden exprimir más en sus sucias fábricas y vas a caer enferma/o en un Hospital de los que ellos están privatizando. No, no son las anarquistas las que te arrastran a la miseria, a buscar comida en la basura o al suicidio. Los terroristas son ellos. Terrorista es el Estado.
No te lo dirán en los medios de comunicación, pero muchos de los derechos laborales y sociales que ahora nos están robando los consiguieron los y las anarquistas, y por eso se nos persigue, criminaliza y encarcela. Por ser el único movimiento real de transformación.
El anarquismo se basa en el apoyo mutuo, la solidaridad, autogestión, igualdad… el único terrorista es el sistema capitalista que se perpetua mediante la explotación y la destrucción.
No podemos quedarnos impasibles ante esta nueva escala represiva, ya que hoy son los y las anarquistas, pero mañana puedes ser tu. Si la represión avanza, la solidaridad entre los y las oprimidas también debería hacerlo.
Por ello pedimos la inmediata libertad para las compañeras y compañeros detenidos y el cese de la persecución hacia el movimiento libertario. También mandamos un fuerte abrazo a los y las presas en lucha que siguen resistiendo tras los muros reclamando sus derechos y el fin de las torturas carcelarias.
Por muchas tergiversaciones y difamaciones que recibamos, por muchos montajes y encarcelamientos que suframos: ¡No podréis con nosotras! ¡Cada golpe nos une más!